
Al producirse una explosión que le quemó la mano y ante la desesperación, sumergió la misma en un frasco con esencia de Lavanda. Al ver el alivio inmediato que esto le produjo sumado a que posteriormente no le quedaron marcas de la quemadura, se sintió empujado a estudiar en profundidad las propiedades de los aceites, dando origen así a la AROMATERAPIA.